Lubricante 100% sintético, especialmente diseñado para proteger aquellos dispositivos que tratan los gases de la combustión en los nuevos motores que hoy se incorporan al mercado.
Si bien su formulación contempla ambas motorizaciones, la principal razón de su uso radica en aquellos motores Diesel que poseen filtro de partículas, también conocido como DPF (Diesel Particulate Filter).